La tecnología innovadora define el carácter de las secadoras Siemens. Las secadoras con bomba de calor ofrecen máximas prestaciones y eficiencia energética, porque el calor se retiene para ayudar en el proceso de secado. Las secadoras de condensación ofrecen gran flexibilidad: las puedes colocar donde quieras porque solo necesitan un conducto de salida.
Cómo elegir la secadora adecuada.
A la hora de elegir una secadora, hay que plantearse una serie de preguntas: ¿qué modelo es el más adecuado a las necesidades individuales del usuario y al espacio disponible?
Existen secadoras con bomba de calor y de condensación. A continuación se muestra más información acerca de cada tipo de secadora.

Secadora con bomba de calor
Las secadoras con bomba de calor son más eficientes energéticamente: reutilizan el calor generado para continuar con el proceso de secado. Lo que significa que prácticamente no se producen pérdidas de calor. Funcionamiento de una secadora con bomba de calor: el aire caliente se inyecta en el tambor y, por lo tanto, sobre la ropa húmeda. El aire extrae la humedad de las prendas y vuelve a la bomba de calor. Allí, el aire se enfría gracias a un refrigerante. El aire caliente se devuelve a las prendas del tambor y así se completa el ciclo de secado. El agua condensada se acumula en el depósito de condensación de la secadora o, en los modelos con conexión a desagüe, se expulsa directamente.

Secadora de condensación
Las secadoras de condensación pueden colocarse prácticamente en cualquier lugar donde haya una toma de corriente, porque no precisan manguera de salida de aire.
El aire frío se calienta y extrae la humedad de la ropa. Con el agua condensada extraída de la humedad de la ropa, el sistema limpia el condensador varias veces durante el ciclo de secado. El aire, ahora seco y frío, se calienta de nuevo y cierra el circuito.